NOSTALGIA DE COSAS QUE NO HE VIVIDO
Como la vida privada de los árboles
(o de los náufragos): aferrado a estas palabras
en el océano como una mesa
cubierta de partituras, y un barco
navegando en los ojos, escribo:
una imagen absurda que se confunde
con la nostalgia de cosas que no he vivido,
como la vida privada de los árboles
o de los náufragos.
CHAQUETA
Cuelgo mi traje en la t de tristeza
y me abrocho al otro día
la palabra equivocada.
CLAVES PARA UN MONÓLOGO DE DOS
Caminábamos oscuros por la noche sola
de la mano de unos versos que cosían la boca
con un par de puntos a favor del silencio
-un juego de palabras-, la lengua
se hacía un nudo de hilo, para enredar
la metáfora de esas citas nocturnas
que se llevaban a cabo en parques,
cuyos nombre convertíamos en claves
o cruces para marcar el mapa
de nuestros desaciertos.
Anwandter, Andrés (1974)
Como la vida privada de los árboles
(o de los náufragos): aferrado a estas palabras
en el océano como una mesa
cubierta de partituras, y un barco
navegando en los ojos, escribo:
una imagen absurda que se confunde
con la nostalgia de cosas que no he vivido,
como la vida privada de los árboles
o de los náufragos.
CHAQUETA
Cuelgo mi traje en la t de tristeza
y me abrocho al otro día
la palabra equivocada.
CLAVES PARA UN MONÓLOGO DE DOS
Caminábamos oscuros por la noche sola
de la mano de unos versos que cosían la boca
con un par de puntos a favor del silencio
-un juego de palabras-, la lengua
se hacía un nudo de hilo, para enredar
la metáfora de esas citas nocturnas
que se llevaban a cabo en parques,
cuyos nombre convertíamos en claves
o cruces para marcar el mapa
de nuestros desaciertos.
Anwandter, Andrés (1974)
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