Ir al contenido principal

La isla sin Gilligan

El comediante Bob Denver, estrella de la serie de televisión "La isla de Gilligan" en la década del '60, murió a los 70 años de edad como consecuencia de complicaciones de un tratamiento para combatir el cáncer. Denver inició su papel como protagonista del programa en 1964 pero hasta hace poco continuaba haciendo apariciones en diversos eventos en los que personificaba a Gilligan.
El show, centrado en siete náufragos en una isla perdida, se produjo durante tres años aunque luego continuó emitiéndose y atrayendo a miles de seguidores en todo el mundo.

gilliganEl elenco de "La isla de Gilligan" volvió a interpretar sus papeles en varios reencuentros, incluyendo a "Los náufragos de la isla de Gilligan" en 1979 y una versión animada de ciencia ficción llamada "El planeta de Gilligan", en 1982.

Denver también apareció como invitado especial en otros programas de televisión como "El crucero del amor", "La isla de la fantasía", "Baywatch" y "Roseanne".

Bisama parece que es muy joven pues dice no recordar si la serie la daban o no en Chile. Efectivamente la daban y creo que por Canal 13. Ginger, la estrella de cine era batsante rica y la otra chica, Mary Ann, también, con esas camisas escotadas. En alguna película (cuál habrá sido?) las chicas hablaban del profesor Hinkley como un sex symbol con el que fantaseaban. De repente la torpeza de Gilligan me llegaba a irritar. La película en que recordaban el aniversario del rescate y volvían a naufragar era re entretenida. La canción también es otra pieza, otro ícono ochentero o setentero.

Mucho blog le lleva saludos a Bod Denver en su viaje. Es curioso que sólo 3 años de trabajo te permitan dejar esa marca. Buen viaje, esta isla no será la misma. Ah! Aquí esta el comienzo inolvidable:



Comentarios

Bisama dijo…
oye. no la recuerdo. en serio. Puedo recordar star trek en chilevisión y cosas como manimal y automan y el hechizero pero no recuerdo a gilligan. quizás se borró de mi mente. hay un cuento de ci/fi así que después copiaron en futurama: el tiempo, en vez de ser lineal hace fast foward. te pierdes cosas en el medio. te olvidas. te quedas lleno de agujeros blancos. lo deberías haber visto pero no lo viste. eso. saludos.

a.

Entradas más populares de este blog

El Nuevo Coloso, de Benjamin Sachs

"Como todos los lectores saben, El nuevo coloso es una novela histórica, un libro meticulosamente documentado situado en América entre 1876 y 1890 y basado en hechos reales. La mayoría de los personajes son seres que vivieron realmente en esa época, e incluso cuando los personajes son imaginarios, no son tanto inventos como préstamos, figuras robadas de las páginas de otras novelas. Por lo demás, todos los hechos son verdaderos -verdaderos en el sentido de que siguen el hilo de la historia- y en aquellos lugares en los que eso no queda claro, no hay ninguna manipulación de las leyes de la probabilidad. Todo parece verosímil, real, incluso banal por lo preciso de su descripción, y sin embargo Sachs sorprende al lector continuamente, mezclando tantos géneros y estilos para contar su historia que el libro empieza a parecer una máquina de juego, un fabuloso artefacto con luces parpadeantes y noventa y ocho efectos sonoros diferentes. De capítulo en capítulo, va saltando de la narració

Una oración muy muy larga o Aquí no hay punto aparte?

La columna es del NYT: "“No book worth its salt is meant to put you to sleep,” says the garrulous shoemaker who narrates the Czech novelist Bohumil Hrabal’s “Dancing Lessons for the Advanced in Age” (1964), “it’s meant to make you jump out of bed in your underwear and run and beat the author’s brains out.” Thirty-three pages into what appears to be an unbroken highway of text, the reader might well wonder if that’s a mission statement or an invitation. “Dancing Lessons” unfurls as a single, sometimes maddening sentence that ends after 117 pages without a period, giving the impression that the opinionated, randy old cobbler will go on jawing ad infinitum. But the gambit works. His exuberant ramblings gain a propulsion that would be lost if the comma splices were curbed, the phrases divided into sentences. And there’s something about that slab of wordage that carries the eye forward, promising an intensity simply unattainable by your regularly punctuated novel. Hrabal wasn’t th

El Gran Santiago